Los demandantes alegan que la forma en que Trump anuló "DACA" viola el "debido proceso" y contraviene la Constitución y las leyes de EEUU.
El presidente Donald Trump cedió a las presiones de diez estados que habían amenazado con demandarlo si no anulaba “DACA”, pero este miércoles, 15 estados, encabezados por Nueva York y Washington, entablaron una demanda para salvar el programa de alivio migratorio.
Como parte de una demanda entablada en un tribunal federal en Brooklyn, abogados de 15 estados y el Distrito de Columbia, sede de la capital estadounidense, pidieron que la corte frene los esfuerzos de Trump de eliminar de forma escalonada el programa de “acción diferida” (DACA) de 2012, que ha protegido de la deportación a unos 800,000 jóvenes indocumentados.
La decisión de Trump, en todo caso, implica una vigencia limitada de “DACA” hasta el 5 de marzo de 2018, dejando que los permisos venzan de forma escalonada hasta 2020, dependiendo de cuándo fueron renovados por un periodo de dos años.
El próximo 5 de octubre vence el plazo para la última renovación para quienes tienen permisos que vencen en o para el próximo 5 de marzo de 2018.
Rumbo a un evento en Bismarck (Dakota del Norte), Trump insistió hoy en que el Congreso debe encontrar una solución a la situación de los jóvenes indocumentados, y dijo confiar en que los legisladores sí lograrán un “acuerdo permanente” que incluya la seguridad fronteriza y deje “contentos” a todos en el debate.
Pero los estados, muchos de ellos bajo control demócrata, no esperarán una impredecible respuesta del Congreso, e iniciaron el litigio argumentando además de que la decisión de Trump es discriminatoria, tomando en cuenta que la mayoría de los beneficiarios de “DACA” son de origen mexicano.
Al presentar la demanda, el fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman, explicó que la decisión de Trump de anular “DACA” causará un “enorme daño económico” para Nueva York, donde viven cerca de 42,000 “DACAmentados”.
Mientras, en una rueda de prensa en Seattle (Washington) con seis “DREAMers”, tanto el fiscal general, Bob Ferguson, como el gobernador, Jay Inslee, afirmaron que la anulación de “DACA” es otro ejemplo de las “cosas indignantes” y repulsivas que ha hecho la Administración.
“Si la abrumadora mayoría de los Dreamers fuese blanca, ¿Hay alguien que en realidad crea que este presidente tomaría la acción la que tomó ayer?”, cuestionó Ferguson.
“La ola de indignación, las voces que han surgido en todo EEUU es una buena señal de que el Sueño Americano está vivito y coleando… (la anulación de DACA) este es un eslabón más en una larga cadena de abusos que este presidente ha intentado imponer en esta brillante nación”, dijo Inslee.
Según la demanda, que incluye a Carolina del Norte, Connecticut, Delaware, Hawaii, Illinois, Iowa, Massachusetts, Nuevo México, Oregón, Pensilvania, Rhode Island, Vermont y Virginia, la movida de Trump para revertir el programa creado en agosto de 2012 por la Administración Obama viola el “debido proceso” de los jóvenes, y contraviene la Constitución y las leyes del país.
La demanda se produjo un día después de que el “DREAMer” Martin Batalla Vidal, junto con el grupo “Make the Road New York” (MRNY), entablaron una demanda para impugnar la cancelación de “DACA”, que prevé la eliminación gradual del programa al dejar vencer los permisos de trabajo y estancia legal.
El fiscal general de California, Xavier Becerra, dijo ayer que su estado prevé entablar una demanda para resguardar “DACA”, pero no precisó cuándo. California es el estado con el mayor número de beneficiarios de “DACA”, con un total de 222,795, según datos oficiales.
En 2015, una veintena de estados, liderados por Texas, lograron bloquear los alivios migratorios anunciados por la Administración Obama –conocidos por sus siglas en inglés “DACA+” y “DAPA”-, que hubiesen ampliado la protección a más “DREAMers” y a adultos indocumentados con hijos ciudadanos o residentes legales.
Pero los tribunales jamás se pronunciaron sobre la constitucionalidad de los alivios migratorios sino que los bloquearon porque la Administración Obama no cumplió con los requisitos de procedimiento para este tipo de medidas, y no publicó el reglamento en el diario oficial del gobierno (“Federal Register”).
La Administración Trump anuló en junio pasado la orden ejecutiva de 2014 que autorizó esos alivios migratorios, pero también afrontaba ayer mismo una inminente demanda de Texas y otros 9 estados republicanos si no anulaba “DACA”.
Marielena Hincapié, directora ejecutiva del Centro Nacional para Leyes de Inmigración (NILC), dijo que “DACA” cuenta con una enorme popularidad y tanto estados con tendencia demócrata como aquellos bajo control republicano han dado su apoyo a los miles de jóvenes inmigrantes que ahora afrontan “un caos aterrador”.
Hincapié elogió la decisión de los 15 estados de luchar contra los “implacables y desvergonzados ataques y xenofobia de la Administración contra nuestras comunidades, y contamos con su liderazgo al trabajar juntos para estar a la altura de los ideales de este país de libertad y justicia para todos”.
NILC y la “Clínica para los Derechos de los Trabajadores y los Inmigrantes”, de la Facultad de Leyes de Yale, representan a Batalla y MRNY en su demanda en Nueva York.