Algunas costureras deben trabajar hasta 70 horas semanales.
Una investigación del Departamento de Trabajo (DOL) reveló hoy que conocidas compañías como Forever 21, T.J. Maxx y Ross Dress For Less están utilizando proveedores de ropa que no cumplen con las leyes laborales con sus trabajadores.
“Necesitamos erradicar el abuso entre los trabajadores de la industria de la costura en California y en todo el país y necesitamos el apoyo de estas tiendas para evitar que se sigan cometiendo abusos”, declaró Ruben Rosalez, vocero regional del DOL.
Las informaciones indican que al menos tres niveles de empresas están involucrados en el multimillonario negocio de la costura: las compañías que venden el producto directamente al público, los intermediarios y los contratistas que elaboran el producto.
Actualmente las autoridades federales sólo pueden penalizar a los contratistas que emplean directamente a los trabajadores y violan las leyes, y es por ello que están buscando la colaboración de las grandes tiendas para frenar el abuso constante.
“El modelo de negocios los ha protegido de cualquier responsabilidad legal, pero ellos son los que fijan los precios y piden hacer la prenda de ropa a precios de hace años y el que sufre es el trabajador”, indicó Rosalez.
Reynaldo Leal, quien lleva décadas manejando una máquina de dos agujas, entiende de primera mano el problema.
El inmigrante, oriundo de Puebla (México), manifestó a Efe que las tarifas que le pagan son la misma de hace 25 años. “Y cada vez que uno va a decir que es injusto lo amenazan con no darle más trabajo y no queda otro camino”, matizó.
La investigación del Departamento de Trabajo incluso encontró que algunas costureras deben trabajar hasta 70 horas semanales para ganar un salario de 270 dólares en California, donde el mínimo es 10 dólares la hora.
Este año, las autoridades lograron recuperar cerca de 1,3 millones de dólares en salarios para trabajadores de la costura en el Sur de California, en su mayoría inmigrantes latinos.
Burlington, Macy’s, Charlotte Ruse, Nordstroms, A’gaci, Windsor, Fashion Nova, también estarían usando contratistas que violan las reglas de trabajo, según la investigación de las autoridades federales que ya están hablando con esas compañías para que no usen los productos de estos contratistas y establezcan un plan de monitoreo para ayudar a que la industria sea justa con sus trabajadores.
“Este Viernes Negro queremos que la gente piense si lo que estoy comprando fue hecho por un trabajador al que le pagaron un salario justo, no es sólo el problema de unos, es de todos” vaticinó Jessie Kornberg, vocera de la organización de ayuda legal Bet Tzedek, quién ha representado a decenas de trabajadores de esta industria.